lunes, 30 de diciembre de 2013

vacaciones (II) semipermanentes. reescribirme.


y me fui

y hasta los madroños eran más rojos

estreno de año en agenda holandesa. no puede ir mal.

"somos libres, gata"

es la habitación donde crecí, gata

(de día - diestra) calibro mi melena. hoy me despido de ella.
el anterior punto y aparte fue cuanto me rapé.
han pasado cuatro años y medio y 

(de noche - siniestra)  muchos mechones me llegan hasta la cintura.
 ya no necesito raparme.
no tengo que destruir todo lo anterior.
rincones de mi habitación.
me enamoré de esta foto por los tatuajes.
golondrinas, flores alrededor de los pezones,
mariposas.
las hadas. las hadas tienen historia

próxima parada: colores, o
"sobre la aburrida discreción que la naturaleza
otorgó a los tonos de cabello humano, en
nada comparables a las plumas de los pájaros
o a  las alas de las mariposas o a las flores"

el gustazo de poder cumplir mis palabras.
y aderezarlas con vaho, humo y cava.
(no reivindico nada.
es un acto de amor.)



lunes, 23 de diciembre de 2013

cuenta atrás - pronto hará bastante frío como para hacer hogueras



mañana terminan gran parte de mis rutinas tal y como las conocía estos casi tres últimos años.
último madrugón. currar de mañana, despedirme de la gente, dejar mi tarjeta de acceso a las chicas de seguridad.

y llegar a casa y decirle a la gata 'gata, somos libres'. luego nos vamos, gata y yo, una semanita larga a desconectar y resetear. la gente lo llama navidad en familia, yo lo llamo vacaciones paganas de momento, ya vendrá el tres de enero y su cola en el INEM. ahora es el comienzo de un cambio. se supone que todo está mal y todo es muy difícil ahora y que es una putada, pero tengo tantas ganas de hacer cosas, otras cosas. 

y mañana cambia todo. 

he estrenado la agenda para 2014. me la compré en Holanda, en un pueblecito de Friesland. está en holandés, por supuesto. cuando la compré aún no sabía que me despedirían. la compré pensando en no tener que llenarla con este trabajo. una agenda más, no. ya tengo varias, varias gastadas allí. y al final ha sido así. y no sé con qué nuevas y emocionantes aventuras la voy a llenar. es un misterio.

es mañana, me levanto dentro de seis horas y poco, y es mi último día. imagínate: hasta he comprado caramelitos. no hay más: contenta llegué y contenta me voy.


hago la maleta, deshago media maleta, hago la maleta, escucho este disco mientras tanto. hago una pausa. fumo. estreno la parte de notas de mi preciosa agenda. escribo planes, metas, objetivos y proyectos para el 2014. me salen 37. me parece perfecto. 



Circo del Sol



(por fin fui, después de años y años de youtube.
les conocía hasta las caras.
humanos tan bellos
que no parecen humanos)


viernes, 20 de diciembre de 2013

cuenta atrás (III)

paso mi último viernes aquí buscando fotos de melenas de colores y tintes estridentes. año nuevo, vida nueva, melena nueva.

necesito tener la melena de colores. los tengo dentro luchando por salir.

                                           

(y adoro a Chloé Norgaard)
















jueves, 19 de diciembre de 2013

cuenta atrás (II)

tres días y medio más. las tres horas que faltan hoy, las seis horas de mañana, las del lunes y las del martes. y después se acabó este trabajo para mí. no más puto uniforme no más ver pasar la vida desde esta recepción desde la que no se ve la luz del sol. que conste que no es nada personal, no es un problema específico de esta recepción: arriba, los que trabajan en el departamento no están mejor. supongo que ellos creerán que sí, porque tienen un sueldo más alto y más responsabilidades y a algunos su trabajo les llena, es el trabajo que querían hacer, el trabajo al que aspiraban. están aquí de sol a sol aunque lo del sol es un decir porque no lo ven. 


arriba, en el departamento de innovación de este edificio tan cojonudo y tan inteligente y de diseño tan ultramoderno que el arquitecto se llevó algún tipo de palmadita oficial en la espalda, no hay ventanas que puedan abrirse para renovar el aire y no hay cristales transparentes, sólo tintados. no se aprecia si hace sol o está nublado. no se puede ventilar de la manera más simple, porque las ventanas no están diseñadas para abrirse. hace falta un sistema de ventilación artificial. lo mismo pasa en cada sala de reuniones, lo mismo pasa en la sala de conferencias, donde caben setenta personas. reunión tras reunión, respiran sobre aire ya respirado, viciado, contaminado. cuando alguien enferma enferman todos. 


y está el hecho objetivo: los que trabajan arriba aparentan más edad de la que tienen. casi nadie aparenta la edad que tiene y nadie parece más joven. todos los que llevan unos años arriba, envejecen más rápido de lo normal. no puede ser buena señal. 

los edificios en este complejo empresarial tienen paredes de cristal trucado. los de dentro apenas ven lo que hay fuera, pero los de fuera ven lo que hay dentro. esto, en edificios de muchas plantas, siempre me ha dado la sensación de granja humana. gallinas ponedoras en jaulas. humanos ponedores en jaulas. humanos productivos, eficaces, obedientes y agradecidos. 

ya me lo han dicho un par de veces: tienes suerte de que te despidan, eso ahora es un lujo. cualquier hijo de puta puede declararse en suspensión de pagos y hacerte trabajar gratis hasta que te pudras o te canses y te vayas tú sin paro ni nada que se le parezca. 

la otra mañana fui a tomar un café, estaba bastante resfriada y al primer sorbo me dio un ataque de tos. la reacción instintiva de la mujer que estaba justo a mi lado, que era poco más mayor que yo y que estaba desayunando con una compañera, fue poner a salvo de mis esputos su cartera de Marc Jacobs que probablemente cuesta más que mi indemnización por despido. y volví a contar las horas que me quedan de estar aquí. 

me acuerdo de un flemón bastante salvaje que me salió el año pasado. era fin de semana y no podía soportar el dolor hasta el lunes. probé todo tipo de remedios caseros, que hicieron efecto: el efecto de acelerar el proceso. en dos días tenía un flemón que aparentaba una semana. no podía soportar el dolor y me armé de valor y me lo exploté yo misma. recuerdo el dolor insoportable y recuerdo pensar que era imposible que toda esa mierda estuviera ahí dentro y sobre todo recuerdo la infinita satisfacción de después, ese profundo descanso y dormir sin que me despertara el dolor. me sentí muy orgullosa de mí misma por haber sido valiente (qué bestia, dijo el dentista) (pero has hecho bien, añadió) 
y ya ves, es un recuerdo tonto que me viene a la cabeza estos días. tres y medio.

(esta vez tengo que aguantar hasta el lunes. incluso hasta el martes. pero no me importa.) 



lunes, 16 de diciembre de 2013

¿no os pasa?

a veces me dicen que he dicho o hecho incluso hay fotos de momentos que no recuerdo en absoluto.

y otras veces me acuerdo perfectamente

(con todo detalle,

con los colores,

los olores

las palabras y las sensaciones)

de cosas que no sucedieron.



miércoles, 11 de diciembre de 2013

cuenta atrás

y ahora ¿qué vas a hacer? ¿qué planes tienes?
dices mientras clavas tu pupila en mi uniforme azul

contar los días laborables que faltan para irme de aquí (nueve cuando salga por la puerta hoy)
orgasmarme a todas horas sólo de pensar en no ponerme este uniforme nunca más en no volver a trabajar para el Mal en no hacer este trayecto de una hora de ida y una hora de vuelta en metro con ese transbordo en tres olivos diseñado por algún psicópata hijo de puta.
pesar unos cinco kilos menos cada día que pasa.
pasarme todo enero de la cama a la barra, de la barra a la bañera, de la bañera a la cama y vuelta a empezar.
entrenar. sacar más y muchas más fuerzas de esta flaqueza. llenar el salón de mariposas y de criaturas y de rarezas.
girar sobre mí misma sin parar sin parar sin parar. volar.
volar.
contar mis moratones. hacerme más. 
vestir como una perra del infierno. teñirme el pelo de morado, tatuarme más, raparme un lado. 
sacar brillo a verbos viejos
emborracharme. comer sushi. follar. fumar. dormir. leer. escribir. 
estrenar los que están por venir. 

(¿qué planes tengo? ¿y tú me lo preguntas? di, ¿qué planes tienes tú?)

que siga la música





me llegan canciones. me las descubren.

estoy llena de música y algunas canciones las escucho una y otra vez, como Deus ex machina de Reddie Razorblade y Niña Marmota.

por el camino se me ocurre que conozco a quien me ha descubierto esta canción (alguien que se merece una entrada aparte) gracias a que un buen día llegó hasta este blog y me escribió. así que si no fuera por este blog yo no conocería esta canción.

a veces cosas diminutas cobran sentido.

últimamente cobran sentido tantas cosas diminutas que me están haciendo un algo grande.

que siga la música sí
que siga la música
que siga

viernes, 6 de diciembre de 2013

movimiento perpetuo


anoche ya estaba en la cama entre sábanas de franela
la luz apagada a punto de dormir y tuve que atrapar
este pensamiento
porque sabía que por la mañana no lo iba a recordar


mi pensamiento no es muy musical, eso es así,
a veces la necesito pero en general mi casa suele estar en silencio
 desde que empecé a hacer barra,
cada vez más pienso en música y con música
la necesito más
la música unida al movimiento.
que no hubiera escrito eso hace unos meses.

eso fue anoche, esta mañana
tenía un mensaje de una amiga que me mandaba esta canción

gracias, kobita.

jueves, 5 de diciembre de 2013

he puesto nombre a cierto sector humano que me irrita pero que no conseguía unificar en una palabra:

los ultracoherentes.

una cosa es ser coherente, pero ser ultracoherente es aburrido y hasta peligroso.
y bueno,

me irrita.

contradecirse un poco es sano. hay que llevarse la contraria a uno mismo de vez en cuando.


al profundizar en google maps se pueden descubrir cosas curiosas

todavía está el cartel de 'se vende' en la ventana que ya es mi casa
y hay bandejas con comida para los gatos callejeros

(juraría que veo uno entre los arbustos)

junto al portal de la casa donde viví antes. 

martes, 3 de diciembre de 2013

no necesitas una voz dentro de tu cabeza que te diga 'tú no puedes'

cuando ya la tienes al teléfono.

-tú no puedes hacer eso
tú no sabes hacer eso
tú cómo vas a hacer eso
si no tienes dinero
si no tienes ni idea
¿eso? eso no vale para nada
tú te crees que todo es muy fácil.

-y tú te crees que todo es muy difícil,
tú te crees que todo es imposible,
y eso es peor.
y yo te entiendo,
hago un esfuerzo y te entiendo,
vale,
pero pienso de otra manera
no puedo hacerte caso
no voy a hacerte caso
porque pienso que puedo,
que sé,
y que si no sé
aprenderé,
que lo del dinero es relativo,
y que eso, lo que sea, todo,
vale para algo,

madre.